1.11.08
Un tarde de sábado
Había dejado para el fin de semana todas las tareas que llevo semanas sin hacer. Tengo 5 lavadoras por poner, y tantas planchas pendientes. Pasar la aspiradora, hacer algo de compra, limpiar el baño... Y sin embargo estoy pegada al ordenador, enfrascada en entradas que no terminan de salir, buscando canciones. O jugando al Solitario Spider de manera mecánica, casi maniática. Al final son casi las 9, la lavadora sólo la he llenado 2 veces y mi cuarto sigue estando como si un tornado hubiera pasado por allí. Al menos he descolgado el bikini del pomo de la puerta. Imagino que lleva allí desde Ibiza.
No me extraña que la gata me haya pedido que la suba al altillo, allí arriba las cosas estás bastante más limpias y ordenadas.
Si miro por la ventana veo cómo otra gente hace igual de poco que yo. Vagan de cuarto en cuarto recogiendo ¿calcetines? del suelo, o están tumbados viendo la televisión. En todo el día sólo he hablado para tener una conversación de 45 minutos por teléfono, y al terminar tenía aún menos ganas de ir tachando cosas pendientes de mi lista. Pero al final he sido capaz de arrastrarme hacia el televisor. Ponían una película que nunca he podido ver entera y me interesa y aburre casi a partes iguales, Smila, Misterio en la nieve. La trama es demasiado estrambótica, pero lo poco que dicen está dicho de manera interesante. Y las imágenes son sugestivas - me encanta cómo los interiores hablan de las personas.
En un fin de semana de regresiones como éste, ducharme a las 7 con todo el tiempo del mundo fue como volver a tener 8 años. Mirando el grifo que llena la bañera (un grifo extraño, con forma de venera) con el pelo pegado a la cara y pensando en los deberes que esperan encerrados en la cartera. Entonces los azulejos eran cuadrados, brillantes y rosas. Ahora tengo un monomando, ducha regulable y 20 jabones y cremas distintos. Qué sencillo era vivir en los 80.
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1 comentario:
Mi fin de semana ha sido muy parecido al tuyo, me he castigado sin salir para dedicarme ha hacer cosas inacabadas y asi siguen..quiero otro fin de semana largo...para atascarme en mi hogar. Y en los dos breves momentos que he salido he tenido una regresión de las grandes.Me han regalado una sonrisa, de esas de las de,.. ya no quiero otra que no sea igual...y ahora estoy con sus comics de rehenes posando para mi
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